BnBFinder.com recientemente habló con dos propietarios de Bed & Breakfast en Nueva Orleans sobre sus experiencias e impresiones de su ciudad a raíz del huracán de septiembre de desastre. Esperanzas son altas y casi todos los centro de la ciudad-las empresas están en marcha. De hecho, todos menos dos de los 15 Nueva Orleans Alojamiento y Desayuno Posadas cotiza en BnBFinder.com están abiertas para los negocios. Según Al posadero Hyman, de la ciudad de Jazz agridulce Funeraria tradición local representa el sentimiento mejor de todos.
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Guy Fournier y su esposa Nancy, y sólo recientemente se adquirió-durante las operaciones en el Sully mansión en el Jardín distrito en las inmediaciones de la Avenida St. Charles, el barrio francés y la Revista de la calle. Ellos son desde hace mucho tiempo los aficionados de Nueva Orleáns, profundamente involucrada en la fascinante ciudad de las particularidades de la comida criolla con el jazz. Que ya habían estado considerando la compra de un hotel en Nueva Orleáns como su semi-retiro de negocios desde hace varios años cuando el huracán tocó tierra. Que habían reducido su búsqueda a tres posadas de licencia y sólo después del huracán, su agente inmobiliario les instó a considerar la compra de Sully mansión. Después de muchas noches sin dormir en la deliberación, la pareja decidió invertir en la ciudad que aman y se convierten en parte activa del proceso de reconstrucción. Ahora, justo un mes en pleno funcionamiento, no podían ser más felices con su decisión.
Guy inmediatamente disipado todas las preocupaciones sobre la visita a Nueva Orleans. El centro de negocios, restaurantes y tiendas se encuentran en pleno funcionamiento. El aeropuerto y las carreteras están abiertas. Gas y los comestibles son abundantes. Hay mucho de agua potable, la electricidad es, y no hay malos olores o epidemia de alguna enfermedad. En tanto que permanezca en el más antiguo, conocido zonas turísticas de la ciudad, que ni siquiera ser consciente de que un desastre de la magnitud de Katrina golpeó hace menos de seis meses. Algunos ámbitos, como la boutique y galería de la calle bordeada de la revista son más animado que nunca y prístina. La Mansión Sully ya está completamente reservado para el Mardi Gras (finales de febrero) y espera recibir visitantes de primera vez y desde hace mucho tiempo los aficionados de Nueva Orleáns para todas las ocasiones durante años y años por venir.
Al Hyman del Hotel San Pedro en el barrio francés que la actual situación en un conmovedor, contexto histórico. Las partes más antiguas de la ciudad (fundada en 1718 por colonos franceses) se han construido diques naturales en las orillas del Mississippi. Debido a que son elevados los daños fueron de los 3 o 4 grados huracán variedad, pero no hay nada cerca de la decimación por las inundaciones en los barrios periféricos. El aspecto general de estos renombrados barrios es prácticamente el mismo que antes de Katrina, a excepción de algunos restaurantes aún abiertos, y partes de la ruta de tranvía a lo largo de la Avenida St. Charles aún cerrado por cable y la reparación de carreteras. En el último conteo había alrededor de 150.000 de los 500.000 residentes en el centro en forma de media luna, que incluye el Distrito Central de Negocios, French Quarter, Garden District y Uptown. Al asimilar el más íntimo sentimiento de que a mediados de 1800 cuando la población era de aproximadamente la misma que es hoy en día. Añadió que los restaurantes, bares y cafés están abiertos pero no sólo con las empresas verdaderamente animado. Se requieren reservas con antelación más que antes en los cafés y las líneas son más largos que nunca (pero nunca es demasiado largo). La cosa más contagiosa, con mucho, es el zumbido de optimismo en el aire.
Al Mardi Gras espera (antes de fin de semana a través de 27 de febrero), que se redujo a partir de los años anteriores, pero quizás incluso mejor que el sentido de la solidaridad y la renovación promovida por aquellos que capearon el temporal o han regresado recientemente. Que no disminuye en modo alguno el alcance de la horrible tragedia y pérdidas en las tierras bajas de las salas de la corte en todos los demográficos y socioeconómicos líneas, pero hizo hincapié en cómo las nuevas Orleanians tener una larga tradición de duelo en un espíritu celebrativo, por lo tanto, su referencia a los Jazz funerales. El dolor se expresa en la belleza, especialmente hermosa música.
Asimismo, la Nueva Orleans que fue moneda corriente con la delincuencia, las malas escuelas, y una infraestructura ha descuidado la oportunidad de redimirse y seguir en su larga historia de transformar la tragedia en una rica cultura de los ritos de celebración creada por la ciudad de la mezcla única de los pueblos, sabores y los idiomas, abierto a todos a disfrutar.
Pero es fácil de encontrar un humeante plato de frijoles rojos y arroz, la verdadera hospitalidad sureña y todas las comodidades y encantos que ofrece la ciudad más diferentes en América. Vamos abajo!
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Guy Fournier y su esposa Nancy, y sólo recientemente se adquirió-durante las operaciones en el Sully mansión en el Jardín distrito en las inmediaciones de la Avenida St. Charles, el barrio francés y la Revista de la calle. Ellos son desde hace mucho tiempo los aficionados de Nueva Orleáns, profundamente involucrada en la fascinante ciudad de las particularidades de la comida criolla con el jazz. Que ya habían estado considerando la compra de un hotel en Nueva Orleáns como su semi-retiro de negocios desde hace varios años cuando el huracán tocó tierra. Que habían reducido su búsqueda a tres posadas de licencia y sólo después del huracán, su agente inmobiliario les instó a considerar la compra de Sully mansión. Después de muchas noches sin dormir en la deliberación, la pareja decidió invertir en la ciudad que aman y se convierten en parte activa del proceso de reconstrucción. Ahora, justo un mes en pleno funcionamiento, no podían ser más felices con su decisión.
Guy inmediatamente disipado todas las preocupaciones sobre la visita a Nueva Orleans. El centro de negocios, restaurantes y tiendas se encuentran en pleno funcionamiento. El aeropuerto y las carreteras están abiertas. Gas y los comestibles son abundantes. Hay mucho de agua potable, la electricidad es, y no hay malos olores o epidemia de alguna enfermedad. En tanto que permanezca en el más antiguo, conocido zonas turísticas de la ciudad, que ni siquiera ser consciente de que un desastre de la magnitud de Katrina golpeó hace menos de seis meses. Algunos ámbitos, como la boutique y galería de la calle bordeada de la revista son más animado que nunca y prístina. La Mansión Sully ya está completamente reservado para el Mardi Gras (finales de febrero) y espera recibir visitantes de primera vez y desde hace mucho tiempo los aficionados de Nueva Orleáns para todas las ocasiones durante años y años por venir.
Al Hyman del Hotel San Pedro en el barrio francés que la actual situación en un conmovedor, contexto histórico. Las partes más antiguas de la ciudad (fundada en 1718 por colonos franceses) se han construido diques naturales en las orillas del Mississippi. Debido a que son elevados los daños fueron de los 3 o 4 grados huracán variedad, pero no hay nada cerca de la decimación por las inundaciones en los barrios periféricos. El aspecto general de estos renombrados barrios es prácticamente el mismo que antes de Katrina, a excepción de algunos restaurantes aún abiertos, y partes de la ruta de tranvía a lo largo de la Avenida St. Charles aún cerrado por cable y la reparación de carreteras. En el último conteo había alrededor de 150.000 de los 500.000 residentes en el centro en forma de media luna, que incluye el Distrito Central de Negocios, French Quarter, Garden District y Uptown. Al asimilar el más íntimo sentimiento de que a mediados de 1800 cuando la población era de aproximadamente la misma que es hoy en día. Añadió que los restaurantes, bares y cafés están abiertos pero no sólo con las empresas verdaderamente animado. Se requieren reservas con antelación más que antes en los cafés y las líneas son más largos que nunca (pero nunca es demasiado largo). La cosa más contagiosa, con mucho, es el zumbido de optimismo en el aire.
Al Mardi Gras espera (antes de fin de semana a través de 27 de febrero), que se redujo a partir de los años anteriores, pero quizás incluso mejor que el sentido de la solidaridad y la renovación promovida por aquellos que capearon el temporal o han regresado recientemente. Que no disminuye en modo alguno el alcance de la horrible tragedia y pérdidas en las tierras bajas de las salas de la corte en todos los demográficos y socioeconómicos líneas, pero hizo hincapié en cómo las nuevas Orleanians tener una larga tradición de duelo en un espíritu celebrativo, por lo tanto, su referencia a los Jazz funerales. El dolor se expresa en la belleza, especialmente hermosa música.
Asimismo, la Nueva Orleans que fue moneda corriente con la delincuencia, las malas escuelas, y una infraestructura ha descuidado la oportunidad de redimirse y seguir en su larga historia de transformar la tragedia en una rica cultura de los ritos de celebración creada por la ciudad de la mezcla única de los pueblos, sabores y los idiomas, abierto a todos a disfrutar.
Pero es fácil de encontrar un humeante plato de frijoles rojos y arroz, la verdadera hospitalidad sureña y todas las comodidades y encantos que ofrece la ciudad más diferentes en América. Vamos abajo!
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